Galería ATC se complace en anunciar Indigo Nights, la segunda exposición de Alona Harpaz (Tel Aviv) en Galería ATC. Hace justo tres años, la artista presentaba su primera y exitosa exposición Coming Back To Be A Monkey en nuestra galería, después de participar en Art Madrid 2020.
En Indigo Nights las obras continúan siendo de naturaleza híbrida, entre gráfica y pictórica. La artista se sirve del color y la línea para retratar a personas de su círculo más cercano, incluida ella misma. Los cuerpos parecen originarse en el ambiente —en proceso de delineación— y se articulan con formas planas de colores saturados, fluorescentes y metálicos. Esas figuras, sin embargo, son incorpóreas, pues comparten la misma materia que el fondo. En cierto sentido, diríamos que son retratos captados en el aire, identidades que pronto se desdibujarán para insinuarse nuevamente con otras formas. Unas identidades fluidas y en perpetuo cambio, momentáneas, excepto estáticas.
En sus nuevas pinturas encontramos motivos presentes en series anteriores: cerezas, un búho, un rinoceronte, un gallo, loros y monos, logran extender su presencia pictórica en Indigo Nights con diferentes combinaciones. El visitante que tuvo la oportunidad de examinar su exposición anterior en nuestra galería, Coming Back To Be a Monkey, recordará alguno de estos motivos. La simbiosis de estos elementos con los personajes sugieren motivos personales de la artista que nos son desconocidos.
Harpaz combina los colores intensos de una manera insólita y los aplica sin modulación. Cuando representa únicamente con la mancha, por medio de pinceladas, la forma se insinúa de una manera grácil y jovial. Como, por ejemplo, la mancha marrón oscura en su autorretrato “Alma & me” —de cierta reminiscencia goyesca— que parece corresponder, tras cierta examinación por nuestra parte, a un perro; o la forma color gris y salmón, en otro autorretrato, que resulta ser un búho.
Desde la celebración pop, al sentimiento gótico, glam y avatar en composiciones matissianas, Alona Harpaz continúa investigando en Indigo Nights la vida ultra-contemporánea a través de una pintura intimista y muy personal.
Alona Harpaz nace en Tel Aviv, Israel, en 1971. Su padre nació en un Kibbutz y su madre, rumana, fue bailarina de ballet. Vive y trabaja en Berlín. Su obra se encuentra en importantes colecciones, tanto privadas como institucionales: TEA Tenerife Espacio de las Artes, Israel Museum Collection, Richard Prince Collection, Anita & Poju Zabludowicz Collection, Wendy Fisher Collection, Barbara Gladstone Collection, Chadra Collection, Michael L. Hittleman Collection y Sami & Anette Bollag Collection. Estudió en The Bezalel Academy of Art and Design, Jerusalén, y en el International Center of Photography en Nueva York. Su obra ha sido expuesta en Hezi Cohen Gallery, Tel Aviv; Nicole Klagsbrun Gallery, Nueva York; Sommer Contemporary Art, Tel Aviv; Alessandro de March Gallery, Milán; Ramat Gan Museum, Israel; Tel Aviv Museum; Israel Museum, Tel Aviv; Gropius Bau Museum, Berlín; y Schau Fenster Gallery, Berlín, entre otras.